Opera House en Sídney recibiendo el año 2022
Opera House en Sídney recibiendo el año 2022.
AFP
31 Dic 2021 12:28 PM

El mundo recibe el Año Nuevo bajo la sombra de la pandemia

Agencia
AFP
Ante la ola de contagios por la nueva variante, muchos gobiernos han decidido volver a las restricciones para este periodo festivo. 

El mundo empezó a dar la bienvenida al 2022. Como siempre, las celebraciones comenzaron en Oceanía. La nación de Kiribati, situada en el Pacífico, es siempre la primera en dar la bienvenida al nuevo año. 

Sídney, la mayor ciudad de Australia y una de las primeras en recibir a 2022, había decidido mantener los fuegos artificiales que suelen iluminar su icónico puerto. 

En la ciudad neozelandesa de Auckland, el tradicional lanzamiento de fuegos artificiales desde la Sky Tower dio paso este año a un espectáculo de luces.

En los Emiratos Árabes Unidos, Dubai prepara un espectáculo de fuegos artificiales en el Burj Khalifa, la torre más alta del mundo con sus 828 metros, y el emirato de Ras Al-Khaimah intentará una vez más batir el récord mundial del mayor espectáculo pirotécnico. 

En Río de Janeiro, que suele reunir a 3 millones de personas en la playa de Copacabana, la fiesta sigue adelante. Y en Times Square de Nueva York, los eventos oficiales se reducirán, pero igualmente se esperan multitudes.

Pero el mundo entero inició su entrada al 2022 entre fiestas anuladas, toques de queda y otras restricciones tras otro año de pandemia en el que, pese al despliegue de vacunas, la variante ómicron provocó un auge imparable de contagios.

Fiestas a medias 

Pero ante la ola de contagios sin igual provocada por la contagiosa nueva variante, muchos gobiernos han decidido recuperar las restricciones para este periodo festivo. 

Ciudad de México, Sao Paulo o Bangkok cancelaron sus celebraciones de Año Nuevo; Grecia prohibió la música en bares y restaurantes y el papa Francisco suspendió su habitual visita de Nochevieja al pesebre de la plaza San Pedro.

La mayoría de ciudades españolas anularon sus festejos públicos, pero no Madrid, con un enfoque menos restrictivo, que permitirá a 7.000 personas comerse las uvas durante las tradicionales campanadas en la Puerta del Sol.

Para muchos, en Bombay, Barcelona o Montreal, la fiesta deberá terminar antes por los toques de queda impuestos contra el virus, en algunos casos desde antes incluso de medianoche.

En Sudáfrica, donde se detectó a finales de noviembre la nueva variante, la presidencia decidió lo contrario: levantar el toque de queda justo antes de Año Nuevo, tras dar peor superado el pico de contagios causado por ómicron.

Pero la Organización Mundial de la Salud no quiere bajar la guardia y advierte que el "tsunami" de contagios puede poner a los sistemas sanitarios "al borde del colapso".

Otro año de pandemia

Los últimos 12 meses dejaron un cambio de presidente en Estados Unidos, unos Juegos Olímpicos sin espectadores, sueños de democracia rotos desde Afganistán a Birmania o Nicaragua y la chocante imagen de Leo Messi sin la camiseta del Barcelona.

Pero fue la pandemia, que entra en su tercer año, la que ha dominado nuevamente la vida de gran parte de la humanidad. Más de 5,4 millones de personas han muerto desde la detección del virus en el centro de China en diciembre de 2019.

Más de 280 millones contrajeron el virus según un balance de AFP con base en datos oficiales, aunque la cifra real puede ser muy superior.

Y casi toda la humanidad se ha visto arrastrada por un vaivén de confinamientos y restricciones en función de la evolución de la pandemia.

Las vacunas brindaron esperanza, con más de un 60% de la población mundial inmunizada. Pero su distribución ha sido desigual, especialmente en países pobres, lo que ha facilitado la emergencia de nuevas variantes. La última de ellas, ómicron, ha provocado por primera vez más de un millón de contagios en una semana. 

Francia, que ha alcanzado máximos históricos de nuevos casos, se convirtió en la noche del jueves en el último país en anunciar que esta cepa ya es mayoritaria en su territorio.

Otros países, como Estados Unidos, Reino Unido, España, o Argentina también han registrado récords de nuevas infecciones diarias.

Fuente
AFP