Feminicidio Barrancabermeja Santander
Suministrada
5 Sep 2022 07:37 PM

Rechazo por la libertad de un hombre que mató a una médica en Barracabermeja

Estefanía
Pedraza Bautista
La medida se dio por vencimiento de términos.

Indignación se vive en Barrancabermeja después del cambio que se dio en el proceso de Diego Armando Amaya Pérez, condenado hace 6 años por ser el culpable de la muerte de la médica Yolsabet Durán Guzmán, después de aceptar los cargos. 

Luego de una audiencia ante el Juez Quinto Municipal, el abogado del detenido alegó que su cliente cumplió un plazo razonable privado de la libertad, sin definir su situación. Razón por la que la jueza, con funciones de control de garantías dentro del proceso contra el sindicado, cambió la medida de aseguramiento y puso en libertad al detenido.

“No podemos desconocer este concepto de plazo razonable, al momento de valorar la tardanza en la que incurrieron las autoridades a las que les competía resolver este caso”, señaló la jueza durante la audiencia.

Además, manifestó que el Tribunal Superior de Bucaramanga “demoró 4 años y ahora va casi otro año en el que no se ha resuelto la situación jurídica. Lo cierto es que si bien es una medida suspendida, el plazo razonable se ha desbordado en esta oportunidad”  

Anteriormente el Tribunal ordenó la revisión del proceso porque no se contaba con las pruebas suficientes que demostraran señales de tortura, mientras que Amaya Pérez permanecía detenido en la cárcel de Máxima Seguridad de Palogordo, en Girón. 

Sin embargo, valiéndose de la medida jurídica, y a pesar de que en la última audiencia la Fiscalía le hubiese imputado el delito de feminicidio agravado después de aceptar los cargos; la familia de la víctima exigió que el caso no quede impune, respetando las órdenes de juez, pero solicitando su derecho a esclarecer lo sucedido.

“Rechazamos con contundencia la medida, ya que han sido años reclamando justicia frente a este caso y hoy se expone más a seguir en la impunidad. Por lo que nuevamente hacemos un llamado a las organizaciones sociales, a los líderes y defensores de derechos humanos para que nos sigan acompañando en este proceso”, publicaron en un comunicado la familia y víctimas de este hecho.

La médica tenía 24 años de edad cuando fue asesinada. Fue enterrada en una fosa, en la casa de un amigo cercano, después de ser golpeada por temas pasionales en noviembre de 2016. La joven trabajaba en el Centro de Salud Versalles donde realizaba el servicio rural de su carrera.

Fuente
Sistema Integrado de Información