
Desplazados que llegaron a Ocaña deben salir del coliseo donde están instalados
Ad portas de cumplirse siete mes del inicio de la confrontación armada entre el ELN y las disidencias de las FARC en la región del Catatumbo, la realidad de miles de personas que salieron en condición de desplazamiento, es bastante compleja, ante las miles de dificultades que afrontan.
Una de ellas, siguen siendo los procesos de reubicación de decenas de personas, que no han podido regresar a los diferentes municipios del Catatumbo, por las amenazas y presiones de actores armados.
Con la más reciente disposición de la Unidad Nacional de víctimas, decenas de desplazados que estaban hoteles de la ciudad de Cúcuta, fueron desalojados de los mismos, ante el inicio de los pagos por parte de la Unidad, quienes fueron incluidos en el registro único de víctimas.
De igual forma, la administración municipal de Ocaña anunció que hasta el próximo 22 de agosto, la población desplazada del Catatumbo, que está instalada en el coliseo cubierto Argelino Durán Quintero, podrá estar en el lugar, ante el inicio de los pagos por parte de la unidad de víctimas.
Las 58 familias que permanecen en este espacio, deben salir del coliseo para empezar a recibir los giros correspondientes, como lo dispuso la Unidad Nacional de víctimas, tal como se realizó en la ciudad de Cúcuta.
El secretario de gobierno de Ocaña Fredy Arengas señaló que hasta dicha fecha, se estarán disponiendo de recursos para atender a esta población.
“Las personas que están ubicadas en el coliseo, deben cumplir con los tiempos otorgados para su salida del lugar; unidad nacional de víctimas, es clara; Hemos tenido reuniones para explicar en detalle con el equipo de víctimas de la Alcaldía porque prima los derechos y condiciones vividas por ellos, especialmente de los niños, niñas y adolescentes"; manifestó el funcionario municipal.
Desde el comité de justicia transicional en la provincia se entregó un balance de los casi siete meses de atención en la zona, donde se logró atender a por lo menos 16 mil personas, que por la violencia entre el ELN y las disidencias de las FARC se sigue presentando en la región.
Sin embargo, las familias que han salido desplazadas, han manifestado que los recursos que han sido destinados para estas personas, son escasos, para atender sus necesidades.