
El pasado 9 de julio fue asesinado el Subintendente de la Policía Nacional, José Leonardo Jaimes Fernández, en el municipio de Ocaña, Norte de Santander.
Según las autoridades, el uniformado, junto con otros compañeros, estaban adelantando actividades de control en establecimientos públicos.
Ante lo sucedido las autoridades ofrecieron el pago de recompensa de 50 millones de pesos por información que permitiera la captura de los dos delincuentes que emprendieron la huida , quienes posteriormente fueron capturados y formaban parte de las disidencias del frente 33 de las Farc.