
En Cúcuta ubicaron y le dieron sepultura a un hombre que llevaba 17 años desaparecido
A través de la estrategia de Búsqueda Inversa, la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas, logró ubicar y dar sepultura al cuerpo del señor Enrique Quintero quien había desaparecido hace 17 años en Cúcuta.
En el año 2008 la señora Nubia Esther Patiarroyo y su hija Nicoll perdieron el rastro del señor Quintero su hallazgo fue posible a partir de la estrategia conjunta de Búsqueda Inversa, la cual permite localizar a los familiares de cuerpos identificados pero que aún no han sido reclamados.
Durante 17 años, la familia vivió en la incertidumbre por el paradero de Enrique Quintero Contreras, su esposo y padre. Esa larga espera llegó a su fin el 30 de enero de 2025, cuando fueron contactadas por la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD) para informarles que el cuerpo de Enrique había sido plenamente identificado y se encontraba listo para su entrega digna.
Enrique es uno de los casos que hacen parte de este proceso humanitario en el que la UBPD, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) y el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses (INMLCF) trabajan articuladamente para dar con el paradero de las familias de estas personas que desaparecieron durante el conflicto armado colombiano.
La última vez que la familia Quintero Patiarroyo estuvo unida fue en 2008. En aquel entonces, Enrique y Nubia trabajaban en un circo y Nicoll tenía apenas siete años. Movidos por el deseo de una vida más estable para su hija, decidieron separarse temporalmente: Nubia y la niña regresarían a Cúcuta, mientras Enrique continuaba trabajando como malabarista para reunir los recursos necesarios para iniciar una nueva vida juntos.
Pero el plan nunca se concretó. Una tormenta arrasó el asentamiento donde vivían y obligó a Nubia y a su familia a desplazarse, fue entonces cuando perdieron contacto con Enrique. Pasaron los años y aunque Nubia lo buscó incansablemente —en las calles, entre malabaristas, en cada rostro anónimo—, nunca logró reencontrarse con él.
El tiempo pasó, pero no la esperanza. 17 años después, la UBPD localizó a Nicoll y a Nubia, a quienes les mostraron una fotografía para confirmar la identidad de Enrique, quien había sido asesinado en Cúcuta en 2010, mientras buscaba a su familia. Desde entonces, su cuerpo reposaba sin ser reclamado en el Cementerio Central de esa ciudad.
«Me sentí mal, porque no pensé que fuera así, de esta forma, en que yo volviera a reencontrarme con él. Yo lo seguía esperando, creía que algún día él iba a volver a retomar nuestro hogar y a seguir juntos con nuestra hija», expresó Nubia durante la ceremonia de entrega digna realizada en el Cementerio Central, acompañada por representantes de la UBPD, la JEP y la Alcaldía de Cúcuta.
Hasta el momento, los familiares o seres queridos de 53 cuerpos identificados han sido contactados a través de la estrategia de Búsqueda Inversa. Otros 26 aún esperan ser reconocidos y reclamados.