
Más de 200 mil usuarios en Bucaramanga en riesgo por deudas de la Nueva EPS
La situación de salud en Bucaramanga es alarmante, ya que más de 200 mil usuarios de la Nueva EPS se encuentran en riesgo debido a la falta de atención médica y entrega de medicamentos.
La entidad adeuda a la red hospitalaria local más de 803 mil millones de pesos, lo que ha llevado a la suspensión de servicios esenciales. Este escenario no solo afecta a los pacientes, sino que también pone en jaque la capacidad del sistema de salud de la región.
La deuda específica con el Hospital Psiquiátrico San Camilo supera los 12 mil millones de pesos, lo que ha forzado a esta institución a limitar su atención a los afiliados de la Nueva EPS. La secretaria de salud de Bucaramanga, Claudia Amaya, ha hecho un llamado urgente al gobierno nacional para que se tomen medidas inmediatas. Sin una intervención rápida, la crisis podría escalar, afectando gravemente a las poblaciones más vulnerables.
Instituciones como Profamilia, Ofimédicas, Uganep y Projection Life han comenzado a restringir sus servicios, lo que agrava aún más la situación. Los pacientes psiquiátricos, así como aquellos con enfermedades crónicas, se ven especialmente perjudicados. La falta de atención médica adecuada puede resultar en consecuencias fatales para estos grupos, que dependen de tratamientos continuos y de un acceso oportuno a medicamentos.
Desde el 14 de septiembre, se han presentado 93 quejas relacionadas con la Nueva EPS, de las cuales solo siete han sido atendidas y resueltas. Este índice de respuesta es inaceptable y refleja la gravedad de la crisis. Sin una acción decisiva por parte de las autoridades, Bucaramanga podría enfrentar un colapso total en la atención médica, dejando a miles de personas sin el apoyo que necesitan para su bienestar.