
Las alcaldías del área metropolitana de Bucaramanga se unieron para realizar una campaña de sensibilización para motociclistas
Continúan las acciones conjuntas entre las alcaldías de Bucaramanga, Floridablanca, Piedecuesta y Girón, con la finalidad de generar conciencia en los actores viales, y en este caso específico, en los motociclistas.
Las administraciones municipales del área metropolitana de Bucaramanga pretenden generar conciencia por parte de los centenares de personas que a diario utilizan la motocicleta como medio de transporte o de trabajo, con la finalidad de reducir los riesgos de accidentalidad y de afectación ante cualquier eventual accidente de tránsito.
El uso del casco
Los motociclistas deben usar un casco de seguridad al momento de movilizarse en sus vehículos, y estos son indispensables para salvaguardar la vida de los actores viales, pues protegen la cabeza y el rostro, zonas críticas en un accidente en motocicleta.
Las autoridades hacen un llamado especial para que todos los motociclistas y parrilleros hagan un buen uso del casco, no solo para proteger su integridad, sino también para cumplir con las normativas de tránsito, cuyo principal objetivo es proteger a las personas.
Le puede interesar: Se convocó una nueva ‘papatón’ para el 24 y 25 de octubre en el área metropolitana de Bucaramanga
Partiendo de la importancia del buen uso del casco, las administraciones municipales, junto al Área Metropolitana de Bucaramanga, lideraron una campaña de sensibilización en la que se muestran varios tipos de motociclistas usando el casco de seguridad, haciendo un llamado a quienes no lo usan correctamente, poniendo en riesgo su salud.
En total se muestran cuatro maneras de usar el casco
“En la vía hay de todo: el coronado, caperucita, el call center y, por supuesto, el crack”, indicaron las autoridades.
El coronado es aquel motociclista que usa el casco como si fuera una corona, sin ajustarlo correctamente, lo que resulta riesgoso porque en caso de un choque o accidente, el casco podría salir volando, dejando la cabeza y el rostro expuestos.
El caperucita hace referencia a los conductores que llevan el casco en los brazos, usando solo la capucha o una gorra, lo cual incumple la norma y aumenta el riesgo de accidentalidad por la dificultad para maniobrar la motocicleta.
El call center describe a los motociclistas que hablan por celular mientras conducen, reduciendo su concentración y exponiéndose a accidentes de tránsito o a la pérdida del dispositivo.
Por último, está el crack, que es el motociclista que usa correctamente el casco, bien puesto y abrochado, garantizando mayor seguridad y cumpliendo con la función esencial de este elemento, que es salvaguardar la vida de miles de motociclistas cada día.