
Iglesia Católica envió mensaje de reconciliación al finalizar la semana por la paz
Desde el pasado 10 hasta el 12 de septiembre se realizó en la región del Catatumbo, la semana por la paz, como mecanismo de seguimiento a la compleja situación de orden público y humanitaria en la zona, donde desde hace ocho meses, se enfrentan el ELN y las disidencias de las FARC.
En los diferentes municipios de la región, se realizaron múltiples eventos culturales, y de carácter social, en pro de las comunidades que siguen siendo afectadas por las constantes acciones violentas, en el marco del conflicto, que sigue generando desplazamientos, confinamientos y homicidios.
El obispo de la Diócesis de Ocaña Monseñor Orlando Olave en diálogos con la FM afirmó que en el desarrollo de la semana por la paz, se realizaron eventos muy significativos de manera articulada con otras instituciones, administraciones municipales, colegios y demás para enviar el mensaje de paz que es el principal objetivo del evento.
Sumado a la vinculación de los niños y jóvenes en estos escenarios, donde las comunidades han tomado la iniciativa de sumarse al llamado y mensaje a los grupos armados para que los dejen por fuera del conflicto.
"Estamos trabajando con los jóvenes, porque es importante vincularlos, para que ellos se sientan parte de este ejercicio de construcción de paz, que sientan que todos somos importantes para la paz, que todos somos necesarios".
De igual forma, junto a líderes sociales, defensores de derechos humanos y las comunidades en general, se analizó la situación del Catatumbo, en medio del conflicto que sigue generando afectaciones a la seguridad de la región.
"Quisimos hacer esta reflexión para ver cómo abordamos el tema de la paz, porque debe ser una apuesta desde la racionalidad, desde el trabajo colectivo y académico, donde todos estamos inmersos y vinculados con la situación del Catatumbo".
Por otra parte, en varios municipios del Catatumbo, se realizaron marchas y caminatas exigiendo a los actores armados que están en conflicto, que los deje por fuera del mismo, ante las dificultades en materia de seguridad y la continuidad de los desplazamientos, confinamientos y homicidios.
A pesar de la petición de permitir un cese al fuego durante la semana por la paz, esta no fue aceptada por los actores armados en conflicto, los cuales continuaron con los enfrentamientos en zonas como Tibú y el Tarra, donde las comunidades campesinas han sido las más afectadas en medio de la violencia.