Reabren colegio en Bucaramanga que tenía a 350 estudiantes sin clases presenciales

La Secretaría de Educación de Bucaramanga confirmó la reapertura de la sede C ‘María Cano’ del Instituto Técnico Dámaso Zapata, ubicada en el norte de la ciudad, luego de que un juez ordenara el levantamiento de la medida cautelar que había dictado su cierre temporal.

La decisión se da tras un recurso de apelación interpuesto por la administración municipal frente a la medida inicial, que obligaba a suspender las clases presenciales y reubicar a los 350 estudiantes matriculados. La medida judicial había generado preocupación y rechazo en la comunidad educativa.

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“Quiero contarles a los padres de familia que el juez ordena hoy el cese de lo actuado y el levantamiento de la medida cautelar, por lo cual se puede restablecer la prestación del servicio educativo en la institución”, anunció la secretaria de Educación, Martha Guarín. Además, aseguró que desde la Alcaldía se continuará trabajando por una solución definitiva para mejorar la infraestructura del plantel.

El cierre temporal, dictado días atrás como resultado de una acción popular, se basó en presuntos riesgos estructurales. Sin embargo, desde la misma institución educativa se cuestionó el alcance de esa medida.

Una de las directivas del colegio señaló que, tras una visita de Gestión del Riesgo, no se encontraron evidencias que justificaran un cierre total. “No hay hundimientos de pisos, hay algunas humedades, pero nada que implique un riesgo inminente”, afirmó.

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En tanto, docentes y padres de familia han insistido en que cualquier decisión sobre la infraestructura de la sede debe sustentarse en estudios técnicos rigurosos. “Desde hace años se han solicitado estudios estructurales que aún están pendientes”, indicaron desde el consejo directivo.

Johana Luna, representante de los docentes ante ese órgano, pidió al gobierno local acciones urgentes. “Necesitamos que la Alcaldía haga los estudios respectivos. No puede ser posible que la comunidad pierda su escuela, por la que tantos años ha luchado”, señaló.

Luna también hizo un llamado para que el municipio avance en las gestiones que permitan adquirir el predio, hoy en manos de la Arquidiócesis, y garantizar así la estabilidad del centro educativo.